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Unión Portuense eleva al próximo pleno ordinario de marzo una batería de propuestas para intentar paliar en lo posible los efectos que la sequía histórica producirá en nuestro municipio. Sequía que está siendo extraordinaria por su intensidad, su extensión y su duración.

La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir garantiza de dos a tres años de abastecimiento humano. Aunque hay zonas en peor estado declaradas de excepcional sequía y disponen de sólo un año de agua. Nuestra zona, la cuenca hidrográfica de Guadalete-Bárbate, se encuentra al 29 % de su capacidad, situación delicada y preocupante. Según la AEMET: “Aunque llueva, no será generalizado ni suficiente como para revertir esta situación tan crítica y las previsiones no invitan al optimismo.”

Ante esta situación toca tomar medidas y ser prudentes con el uso del agua. Asimismo, Unión Portuense solicita que, entre otras cosas, “se convoque una mesa de sequía con el fin de elaborar un Plan Local de medidas de consumo de agua potable en aquellos espacios municipales que usan agua, tales como: edificios municipales, riego de parques, jardines o pistas deportivas, baldeo de calles, etc. Hace ya tiempo que todos los gobiernos de todas las entidades deberían haber puesto en marcha toda suerte de advertencias, recomendaciones destinadas al ahorro y hasta limitaciones para algunas de las concesiones menos necesarias.

La coordinadora de Desarrollo Sostenible de Unión Portuense, Pepa Barrera Lechuga, comenta al respecto: “Tenemos autonomía para tomar, desde ya, medidas locales y no esperar a que nos lo ordenen desde “arriba”. Se echa de menos campañas contundentes para frenar el todavía cotidiano despilfarro del agua. Por ello, incluimos en la moción realizar campañas de concienciación, elaborar un bando para el consumo eficiente y racional del agua potable en la ciudadanía y estudiar métodos alternativos para extraer el máximo rendimiento al agua de las lluvias”.

Desde Unión Portuense, también solicitamos al equipo de gobierno que se interese por los fondos y nuevos programas europeos que ayudarían a poner en marcha la Orden Ministerial ICT/155/2020, que obliga a la sustitución de los contadores de agua con más de 12 años, y aproveche la oportunidad para colocar contadores de telelectura, así minimizar las fugas o las averías en los sistemas de suministro, y evitar así pérdidas económicas y daños en las instalaciones

La ciudad se tiene que dotar de infraestructuras para adelantarnos y adaptarnos a los diferentes escenarios que van a ser inevitables con el fin de evitar consecuencias socioeconómicas y poder tener así capacidad de recuperación. Pepa Barrera finaliza: “Estamos también ante una sequía de responsabilidad. Los gobernantes se caracterizan por ignorar que somos, más que nada, agua, que por cierto ellos también beben”. 

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